Nunca discutas con un imbécil, te hará descender a su nivel y allí te ganará por experiencia

Si vienes con un problema y no traes la solución, tu eres parte del problema

viernes, 2 de agosto de 2013

Diario del estío (XXXV)




Interesa al poder
Me dice la Margarita, la otra, la que yo llamo Magarita que me fije en el grupito de jóvenes que hay sentados a nuestro lado en el bar de las piscina, mientras charlamos y tomamos una cerveza. Casi ni se les siente ni se les oye, están enfrascados en sus móviles, enviando y recibiendo mensajes, y permanecen sentados juntos en torno a una mesa, como podrían cada uno por su cuenta estar tirando piedras al río, aullando a la luna o haciendo el borrico por las calles. Es tremendo, no hay comunicación entre ellos. No sé para que se han sentado juntos, ni quién lo ha decidido, ni tampoco cual será el momento o impulso que les levante y provoque su marcha.
Muchos jóvenes de ahora, la gran mayoría, utilizan las nuevas tecnologías y las redes sociales para, entre otras cosas, estar informados, comunicarse con sus congéneres, hacer comentarios, participar en quedadas físicas o virtuales, bajarse y escuchar música, ver imágenes y vídeos, etc. Tienen un abanico de posibilidades y utilidades muy grande. Pero están perdiendo algo fundamental que es la comunicación física directa, la palabra, la mirada, la contrastación de opiniones, el debate, el roce, el calor humano… Creo que no son conscientes de ello, de que se están alejando de esa faceta tan importante de la vida, y se están ubicando en una nube tecnológica que nos aísla a los unos de los otros.
Lo que hemos ganado en rapidez de información e instantaneidad, lo estamos perdiendo en la vertiente social de las relaciones humanas, que no tienen sustituto tecnológico. Somos seres que nos relacionamos y comunicamos mediante la palabra, la mirada, los gestos, el compromiso, el roce…, habilidades que no pueden suplantadas por ninguna avanzada tecnología, que a este paso, nos llevará a un tipo de relaciones vacías de contenido, inermes, en una sociedad de individuos aislados y atrapados, que seguramente es lo que le interesa al poder.

Diario del estío (XXXIV)


Puente metálico de Malpica sobre el río Tajo


Por los rojos
Leo en las primeras páginas del programa de fiestas del pueblo una cronología de hechos que según su autor han marcado la historia local. Del año 1936 dice: “Se vuela el puente de los tres arcos de hierro, sobre el río Tajo, por los rojos durante la Guerra de Liberación”. La cita está escrita por una persona que seguramente sin mala intención, y siguiendo el relato y crónica de los vencedores, no ha deparado, en dos inexactitudes de bulto. La primera eso de “rojos”. El río Tajo era la divisoria de los dos frentes de guerra, el republicano en el que se encontraba Malpica, y la margen derecha, en manos de los facciosos y sublevados. El puente fue volado por orden del Ejército Popular a las órdenes de la República. La segunda, lo que denomina “Guerra de Liberación”. Franco se alzó contra el poder legalmente constituido y el Estado, mediante un golpe militar. Durante cuarenta años, con prácticas dictatoriales, represivas y vejatorias,  nos “liberó” de la democracia, del progreso, de la libertad…, y de aquellos barros estos lodos.
Sigo con el tema del programa de festejos. Este año el pregón lo da el cura. Inédito e inaudito. Normalmente pregonan aquellas personas que se han distinguido o distinguen en su vida por algo en especial o que su labor profesional ha revestido una especial dedicación y ayuda al pueblo o que son oriundos de él y han alcanzado fama y éxito en otros sitios. En la actualidad, los pregoneros de festejos no tienen nada que ver con la figura del pregonero oficial de antaño y que aún pervive en algunas zonas rurales, cada vez más desplazado por los bandos municipales, y cuyo cometido era hacer público y notorio lo que se quería poner en conocimiento de la población. Los pregones de hoy tienen sus antecedentes en los praecones romanos. Pues bien, el de dentro de unos días, que lleva en el cargo de párroco desde hace poco tiempo, viviendo bien y trabajando poco, aparte de no ser romano sino un peón del adiestramiento ideológico, no reúne ninguno de los atributos y características señaladas. Que me lo expliquen.
Podría seguir con más cosas de la programación, pero de momento lo dejo estar así. No han empezado las fiestas y ya estoy deseando que acaben. Desde hace mucho tiempo, a estas del verano y a diferencia de las de invierno, que son otra cosa, no les encuentro ningún aliciente, nada llamativo, nada que me haga salir y participar. Si puedo, escurriré el bulto y procuraré estar lo más lejos posible.
Hoy ha pasado lo que más o menos estaba previsto que ocurriera: Nada. Queda reducida la comparecencia al me equivoqué, igual que lo dicho por el patrón mata elefantes, y a la traición de su confianza del ex tesorero. Ha pasado el lance de momento, pero la cosa no debe quedar ahí, hay mucho que destapar y aclarar sobre la corrupción y la financiación ilegal del PP, y sus responsables. Cuando no les sirva, se lo quitarán de encima y pondrán a otro, y eso llegará no tardando mucho.