Nunca discutas con un imbécil, te hará descender a su nivel y allí te ganará por experiencia

Si vienes con un problema y no traes la solución, tu eres parte del problema

viernes, 24 de marzo de 2017

24 de febrero, viernes




Este fin de semana han acordado que Marga, mi fiel y paciente acompañante de estos días. Mi cuidadora permanente, pendiente de los detalles, quien me asea por las mañanas, me tapa cuando me desarropo, me auxilia cuando lo necesito, desconecte y se vaya de descanso.

En su lugar quedan mis hijos Mauro y Marcos, un día cada uno, que comparten gustosos esta tarea, y suplen a su madre.  Me gusta este detalle y aunque los dos viven y laboran en Madrid, sus ocupaciones no les permiten estar más tiempo conmigo de lo que desearían. Es importante y valoro en estos momentos la cercanía de los míos.

Es algo que yo no supe hacer con mis mayores, tachón que no me perdonaré jamás. Ellos afortunadamente en este sentido están hechos de otra pasta, lo que valoro y les agradezco.